Llegando a la estación del tren empecé a hacer la fila para comprar mi “billete” a Salamanca, eran como las 10:15 y el tren salía a las once, las filas ahí son peor que en el super, no avanzan ni por casualidad, empecé a pensar que quizá me iban a dar las once si poder compara mi boleto, había solo tres cajas abiertas para mas de doscientas o trescientas personas.
Aproximadamente a las 10:30, suena una voz que empieza a decir: “Billetes para Salamanca de las once taquilla 5, billetes para tal taquilla tal” y una lista como de 5 o 6 lugares, literal eso parecía un hormiguero, todos corriendo para todos lados.
Como era de esperarse, el único tren retrasado era el mío, aproveche ese tiempo para desayunar y anuncian el anden dos para su ya próxima salida, he de confesar que era mi primera vez en una estación de tren europea y pues yo me metí en el coche (vagón) que se me antojó, deje mis maletas en el techo y veo una chava que me espera a que me siente para sentarse a mi lado, en ese momento yo estaba pensando en el actuar europeo de las muchachitas, con esto de que son muy liberales y demás ya estaba yo pensando que ellas lo que hacen es ponerse y esperan a ver tu que haces.
Por lo que no perdí momento y desde antes que arrancara el tren ya estaba hablando con ella, era enfermera, trabaja en Madrid, estudió en la universidad de salamanca, y tenía unos ojos azules impresionantes, lo que me llamaba la atención es que después de preguntarle algo o hacer algún comentario se quedaba callada o como que no daba mucho pie a la plática, yo me preguntaba ¿porque esta maja se había querido sentar junto a mi de manera descarada y luego no pelaba?, después de cómo media hora ya había una buena relación, la plática empezaba a fluir de buena manera y el tren hizo su primera parada.
Cual habrá sido mi sorpresa al darme cuenta que los billetes estaban marcados con el asiento que debías ocupar y el dueño del lugar donde yo estaba… en ese momento estaba llegando.
Toda la mañana me dedique a caminar por la ciudad, es fabulosa, la comida esta impresionante, las muchachitas de en sueño, pero eso ya les iré platicando.
Aproximadamente a las 10:30, suena una voz que empieza a decir: “Billetes para Salamanca de las once taquilla 5, billetes para tal taquilla tal” y una lista como de 5 o 6 lugares, literal eso parecía un hormiguero, todos corriendo para todos lados.
Como era de esperarse, el único tren retrasado era el mío, aproveche ese tiempo para desayunar y anuncian el anden dos para su ya próxima salida, he de confesar que era mi primera vez en una estación de tren europea y pues yo me metí en el coche (vagón) que se me antojó, deje mis maletas en el techo y veo una chava que me espera a que me siente para sentarse a mi lado, en ese momento yo estaba pensando en el actuar europeo de las muchachitas, con esto de que son muy liberales y demás ya estaba yo pensando que ellas lo que hacen es ponerse y esperan a ver tu que haces.
Por lo que no perdí momento y desde antes que arrancara el tren ya estaba hablando con ella, era enfermera, trabaja en Madrid, estudió en la universidad de salamanca, y tenía unos ojos azules impresionantes, lo que me llamaba la atención es que después de preguntarle algo o hacer algún comentario se quedaba callada o como que no daba mucho pie a la plática, yo me preguntaba ¿porque esta maja se había querido sentar junto a mi de manera descarada y luego no pelaba?, después de cómo media hora ya había una buena relación, la plática empezaba a fluir de buena manera y el tren hizo su primera parada.
Cual habrá sido mi sorpresa al darme cuenta que los billetes estaban marcados con el asiento que debías ocupar y el dueño del lugar donde yo estaba… en ese momento estaba llegando.
Toda la mañana me dedique a caminar por la ciudad, es fabulosa, la comida esta impresionante, las muchachitas de en sueño, pero eso ya les iré platicando.
3 comentarios:
jajaja buen look
aparte lo de un buen bloguista escribir poco contar mucho
q bueno mi pete mañana suerte en fantasy
Primera vez en tren en Europa? en el mundo querrás decir... a menos que te hayas subido al Saltillo-Parras, un abrazo y cuidado con las apariencias...tu fresco
Vaya... vaya..
El camino está dando las primeras sorpresas...
A mi no me hables de estaciones de tren en europa porque me dan pesadillas, me cagan!!!
Pero bueno... la verdad de las cosas es que la enfermera madrileña también tenía otro número de billete y quería sentarse junto a tí...
es lo que no te diste cuenta.
Este rock esta comenzando con un buen riff...
vientos mi pic
echele mi pic!!!
Publicar un comentario